
La ceremonia del cacao: el poder conectivo del cacao crudo
¿Alguna vez has oído hablar de la ceremonia del cacao? Es un ritual espiritual muy antiguo basado en el cacao crudo que tiene su origen en los mayas y aztecas. Creían en las propiedades curativas y medicinales de este producto puro, al que llamaban "el alimento de los dioses". Pero ¿es el cacao crudo igualmente divino para comunes mortales como tú y cómo yo? ¡Por supuesto que lo es! Descubre por qué, y mucho más, en este blog.

Cacao crudo versus chocolate
¿Sabías que el cacao crudo contiene más de 300 componentes que ejercen una influencia positiva en nuestra salud? Pero hay que aclarar que nos referimos aquí al producto final puro extraído de las vainas de cacao maduras. ¡Que no es lo mismo que la tableta de chocolate a la que estamos habituados! El cacao ceremonial es un producto 100% natural, a diferencia de las preparaciones occidentalizadas y altamente procesadas que contienen un exceso de azúcares y grasas y, que como resultado, se pierden muchas de las propiedades beneficiosas del cacao original.
El cacao como medicina natural
Veamos brevemente los orígenes del cacao. Las vainas de cacao maduras se obtienen del árbol Theobroma cacao, un árbol que crece en los suelos fértiles de los bosques de América del Sur. Para el cacao ceremonial, estas vainas se recogen a mano y luego se abren para extraer los granos y la pulpa del interior. Granos y pulpa se fermentan juntos, después de lo cual los granos se secan, se tuestan y se pelan. Los granos de cacao así obtenidos se muelen finamente usando piedras de molino, hasta obtener una pasta ultrafina conocida como la manteca de cacao. La manteca de cacao contenida en los granos permanece intacta, lo que le da a nuestro cacao ceremonial un sabor más amargo.
Pero ¿qué hace que este cacao crudo sea tan saludable? La respuesta está en la cantidad de fitonutrientes naturales que contiene: antioxidantes, magnesio y vitaminas del grupo B, por nombrar solo algunos. Además, el cacao crudo también es rico en teobromina, de la que contaremos algo más adelante.

El cacao abre tu corazón y te conecta con los demás
Una ceremonia del cacao te abre el corazón. ¿Te parece esta afirmación demasiado ‘suave’? Aun así, es cierto. En primer lugar, el significado original de la palabra ‘chocola’ es ‘beber chocolate juntos’.Este es, literalmente, el propósito de la ceremonia del cacao. Una vez más: no nos referimos al chocolate caliente de nuestra infancia, sino al producto final puro, apenas procesado y al que no se le ha añadido azúcar.
En segundo lugar, el cacao crudo contiene los mismos componentes que te seducen del chocolate ordinario. ¿Por qué crees que a veces sientes la desesperada necesidad de una onza de chocolate? Porque el cacao contiene numerosas sustancias que te dan una sensación cálida de euforia y plenitud. Por ejemplo, la teobromina estimula el corazón y dilata los vasos sanguíneos. Lo que nos lleva de nuevo al hecho de que el cacao ‘abre el corazón’ literal y figurativamente. Es por eso que esta bebida ayude a los participantes del ritual a conectar consigo mismos y con los demás.
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Ceremonias de cacao, un ritual atemporal
A pesar de que sus orígenes se remontan a muchos siglos atrás, la ceremonia del cacao todavía se practica hoy en día. Su naturaleza ceremonial agrega una dimensión adicional a beber chocolate juntos, elevando esta experiencia por encima de las preocupaciones de la vida ordinaria. Sin embargo, es condición necesaria para que la ceremonia sea exitosa, beber el cacao de forma consciente y serenamente, disfrutando plenamente de este momento mágico y descubriendo cómo reacciona nuestro cuerpo. La ceremonia solo está completa si se vincula la experiencia a una buena intención u objetivo en particular. De esta manera, no sólo abres tu corazón a ti mismo, sino que también te conectas con los demás.
Una mini ceremonia del cacao para uno mismo.
Esta mini-ceremonia no reemplaza la ceremonia real del cacao, pero puedes considerarla como una especie de regalo para ti mismo; un ritual relajante para proporcionar un suave final a tu día.
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- Bebe la taza de cacao conscientemente: pruébalo, huélelo, siéntelo… Permite que todos tus sentidos se despierten con cada sorbo.
- ¿Quieres una conexión aún más fuerte con lo que el cacao te está haciendo? Si es así, puedes meditar, hacer algo de yoga o incluso bailar como parte de tu ritual. Déjate transportar en un viaje que te acercará a ti mismo.
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